Tengo una pistola
Una voz renovadora que avivará en el lector la semilla de la rebeldía.
Cascaradenuez lleva una década sin salir de su casa. Tiene 25 años y sólo se comunica por Internet. Cada noche sueña que es el héroe de un videojuego en una Nueva York poblada por zombis. Tras recibir un extraño mensaje contacta por e-mail con Aenima, un sociópata convencido de que somos esclavos de los genes y de que debemos luchar contra la tiranía de Generatriz, el verdadero Matrix, que nos ofrece el sexo como un cebo para perpetuarse. Cautivado por el destructivo discurso del sociópata, Cascaradenuez va poco a poco convenciéndose de que es un Elegido y de que debe romper con el sistema.
En esta primera novela, Enrique Rubio explora con humor, ternura e ironía las relaciones con el mundo de una generación que tiene a su alcance todo lo virtual, pero mucho más lejos todo lo real.
La novela de Enrique Rubio remite a la espontaneidad de los primeros Mañas y Loriga, la precisión desnuda de Benjamín Prado, o la ironía demoledora de Palanihuk.